Era el momento en que todo es silencio y toses viejas.
Cuando el camión de la basura ya había pasado hacia un rato,y no me quedaban cigarros ni papel.

Ese momento en que tú ya no estabas porque preferías la compañía de tu sofa destartalado, teletiendas y fulanas que se cuelan en la publicidad.

Era el momento en que se acentúa el negro de la noche porque el contraste de la soledad lo ha subido al máximo. Cuando mi gato ya dormía y el tuyo todavia maullaba a lunas inexistentes.

La ciudad hacía rato que dormía, respiraba acompasadamente y tranquila. Yo decidí dormir con la esperanza de no soñar y terminé soñando con la esperanza de que no fuera un sueño.

En ese momento, justo en ese instante robado al tiempo... no pasó nada.

Parpadeo

"La vida pasa en 415 millones de parpadeos...

... pero solo tras uno de ellos estabas tú"

(Imágenes Flickr. Edición Mr L)